miércoles, 15 de febrero de 2012

La calle de las ilusiones

Cada día que pasa me arrepiento más de haber hecho una carrera....¿ por qué estoy yo aguantando a una chula y rodeado de becerros siete horas al día, y por una mierda de sueldo? Sí, porque encima la tía que viene de Madrid para dar la formación es una chula, claro que sabe que se está dirigiendo a becerros y a lo mejor ellos ni la consideran redundante en sus explicaciones.

Personas que está explicando la formadora que te cubre el seguro y empiezan a preguntar opciones estúpidas, - y si me roban las ruedas del coche mientras que yo estoy dentro y a la vez por un rayo sale ardiendo y me choco mantando al hijo menor de mi vecina que no tenía carnet de conducir, ¿me cubriría el seguro?-, en fin......, para hacerselo mirar.

La estupidez me revienta, pero lo que más me está quemando esta semana son las repelentes/retrasadas/gilipollas que ya se les va viendo el plumero. Hablan más que la formadora, preguntan cosas estúpidas y encima son feas de cojones, ¡coño!, que da cosica mirarlas a la cara, pero si podrían ser limpiadoras y cobrar más, ¿qué hacen aquí?.

Esperando que acabe esta calle de ilusiones, porque si estas son las ilusiones....que venga Paco y lo vea.

Firmado: un trabajador más amargado que los de la cola del INEM.

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